Observando a los niños, María Montessori se dio cuenta de que su interés por la escritura y la lectura comenzaba ya en preescolar.
Así, creó las letras esmeriladas, materiales diseñados para dar los primeros pasos en la lectura con un enfoque basado en un modo de aprendizaje directo.
De hecho, con las letras esmeriladas los niños tienen la oportunidad de unir la sensación táctil a la percepción visual, combinándolas con el sonido de la letra que están tocando y reproduciéndola al deslizar la tableta.
De este modo, los niños adquieren excelentes prerrequisitos para entrenar sus manos con vistas a una actividad mucho más compleja, como sujetar un lápiz para escribir.
La importancia de la percepción sensorial en el proceso de aprendizaje es, por tanto, evidente desde los primeros años de vida y lo seguirá siendo igualmente en los años venideros.
Cuando se piensa en el uso de dispositivos digitales como el iPad desde la escuela primaria, se teme que los niños puedan alejarse de la escritura a mano, habilidad fundamental para el desarrollo cognitivo.
En realidad el iPad resulta ser un excelente aliado para la adquisición de conocimientos, habilidades y competencias y no hay que temer un abandono de la escritura a mano.
Para empezar, el dispositivo digital no debe sustituir a las herramientas tradicionales, sino que debe integrarse; esto significa que los cuadernos, bolígrafos y lápices no se dejarán de lado.
Luego, al poder combinar el dispositivo con el uso del Apple Pencil, es posible escribir en el iPad con el mismo agarre de un lápiz o bolígrafo, pudiendo apoyar la mano y la muñeca en la pantalla.
Otra perplejidad típica está relacionada con el hecho de que algunos no consideran que escribir en un cuaderno sea similar a hacerlo en una pantalla, por la diferente sensación entre la rugosidad del papel y la de una pantalla lisa.
En este sentido nos puede ayudar aplicar una lámina como doodroo o fives Screen Protector, dedicada precisamente a que la experiencia de escritura en iPad con Apple Pencil sea "sobre papel".
De hecho, una vez aplicado nos hará experimentar la sensación de usar el Apple Pencil igual que un lápiz sobre papel, como también confirman muchos compañeros profesores "Apple Distinguished Educator".
La posibilidad de crear cuadernos multimedia, con líneas o recuadros adecuados a la edad, junto con la posibilidad de combinar la escritura a mano con imágenes o grabar también la propia voz, obtenemos de nuevo una herramienta educativa que involucra conjuntamente percepciones visuales, auditivas y táctiles favoreciendo el aprendizaje y desarrollo cognitivo del niño.
